El Tesoro Escondido: Cómo Nacen Nuestras Realidades Espirituales Versículo base: Mateo 13:44 “El reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo…” Jesús comparó el Reino de Dios con un tesoro escondido. Y es interesante que Él usara la palabra tesoro, porque todos sabemos lo que un tesoro significa: algo de …
El Tesoro Escondido: Cómo Nacen Nuestras Realidades Espirituales
Versículo base: Mateo 13:44
“El reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo…”
Jesús comparó el Reino de Dios con un tesoro escondido. Y es interesante que Él usara la palabra tesoro, porque todos sabemos lo que un tesoro significa: algo de gran valor, algo que cualquiera desearía encontrar.
Pero la enseñanza de Jesús va mucho más profundo: el verdadero tesoro es descubrir la realidad que Dios tiene para nosotros, y entender cómo podemos alcanzarla.
1. ¿Qué harías si encontraras un tesoro?
La mayoría de las personas reacciona.
Una reacción es simplemente el resultado de algo que vemos o descubrimos.
Cuando encontramos algo de valor —una idea, un llamado, una verdad espiritual— lo primero que surge es una idea.
✔ ¿Qué es una idea?
Es la representación mental que nace en tu imaginación.
Es el primer paso para todo lo que después se convertirá en tu vida.
2. De las ideas a los conceptos
El proceso espiritual y mental que vivimos es más profundo de lo que imaginamos:
- Una idea llega a tu mente.
- Cuando la entiendes, esa idea se convierte en un pensamiento.
- Varios pensamientos forman un concepto.
Y aquí viene una revelación importante:
Lo que gobierna tu vida no son las definiciones, sino los conceptos.
- Las definiciones son generales y universales.
- Los conceptos son personales, internos y particulares.
Proverbios 23:7 dice:
“Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal es él.”
Es decir: vivimos conforme a lo que realmente pensamos, no a lo que sabemos definir.
3. El cristianismo es un asunto de conceptos
Puedes conocer la definición de fe…
pero tu vida mostrará tu concepto de fe.
Puedes conocer la definición de Reino de Dios…
pero tu caminar mostrará tu concepto del Reino.
Por eso, cuando encuentras un tesoro espiritual tienes dos caminos:
- Volver a tus definiciones (lo que siempre has sabido).
- Seguir tus conceptos (lo que realmente crees y vives).
4. ¿Cómo llegar a la realidad que Dios tiene para mí?
Jesús dijo que el Reino es como un tesoro escondido.
Eso significa que ya existe, pero está oculto a simple vista.
La pregunta es:
¿Cómo lo encuentro?
¿Cómo llego a la realidad de Dios para mi vida?
La respuesta está en esta cadena espiritual:
- Tu realidad es el resultado de tu visión.
- Tu visión nace de tus conceptos.
- Tus conceptos salen de tus pensamientos.
- Y tus pensamientos se originan en tus ideas.
Por eso:
✨ Si cambias tus ideas, cambias tus pensamientos.
✨ Si cambias tus pensamientos, cambias tus conceptos.
✨ Si cambias tus conceptos, cambia tu visión.
✨ Y cuando tu visión cambia… ¡tu realidad cambia!
La verdadera transformación comienza en lo invisible.
5. ¿Y si mi realidad no se parece al Reino de Dios?
Mientras estés cómodo con tu realidad actual, no cambiarás de visión.
Y mientras tu realidad no sea el Reino de Dios… esa realidad nunca podrá convertirse en tu visión.
El Reino no se vive por emociones, ni por costumbre.
Se vive con ideas divinas, con verdades de Dios activas y dinámicas en nuestra vida.
6. Tener las ideas de Dios
¿Quieres caminar en la realidad celestial?
¿Quieres vivir como Jesús enseñó?
Entonces necesitas las ideas de Dios, no las tuyas.
¿Cómo se obtienen?
Viviendo las verdades de Dios de manera dinámica.
Cuando Dios te da una idea espiritual, la obediencia produce gozo.
Si lo que haces para Dios lo haces sin gozo, entonces no nació de una idea divina.
Todo empieza con una idea…
Asegúrate de que venga de Dios.
Conclusión
El tesoro del Reino no es algo mágico que simplemente aparece.
Es un proceso interno que comienza con una idea que Dios planta en tu espíritu.
Esa idea cambia tus pensamientos.
Tus pensamientos transforman tus conceptos.
Tus conceptos forman tu visión.
Y tu visión construye tu realidad.
Dios ya depositó un tesoro en ti.
Solo necesitas descubrirlo… y permitir que transforme tu vida desde adentro hacia afuera.
